Mi tobillo sigue a lo suyo

Hoy, veintitrés días después del accidente, he vuelto a ir al médico. A lo mejor muchos habéis pensado, al no volver a escribir desde la última vez en el blog sobre el tema, que estaba saltando y brincando por las calles de Angers.

Pues os equivocáis. Después de ir a Urgencias (martes 13) y me retiraran la férula, me mandaron la ortesis rígida para el tobillo y me dijeron que en diez días fuera al medico de cabecera. Me dejaron con una inflamación en el tobillo de aúpa y los días pasaban y la inflamación no remitía.

Dos días antes de lo previsto (miércoles 21) me dirigí al medico pues no me gustaba un pelo como iba el tobillo, aun inflado y doloroso (la ortesis me la ponía a duras penas pues me comprimía la hinchazón y me dolía).

El buen hombre, después de estudiar el tobillo, me comentó que seria recomendable hacer un strapping (vendaje funcional) para poner el pie en 90º y evitar que el ligamento cruzado exterior sufra (lo del ligamento ya lo sabía yo, pero con la ortesis poco se podía hacer). Sin embargo, con el tobillo así de inflamado, no era recomendable hacer el vendaje, así que me mando unos anti-inflamatorios (piroxicam) y que volviese en dos días (viernes 23).

Los dolores no remitieron y apenas podía caminar. El viernes por la mañana, toda la inflamación concentrada en la articulación se extendió a todo el pie, creando un bonito edema por toda la superficie (jamás he visto mi pie tan gordito).

Por la tarde, el médico me hizo el strapping y me encomendó a visitarle cinco días después (hoy miércoles 28). En realidad él dijo una semana, pero con el congreso de Madrid, decidí que fuera hoy.

Entre tanto, de vez en cuando me ha dado algún ataque “álgico” (sobre todo en la noche), haciendo necesario la ingesta de paracetamol.

Así pues, hoy he vuelto a ir. El tobillo, francamente, va mucho mejor. No me duele ni en el movimiento, la palpación y el apoyo. Puedo andar, con relativa facilidad, aunque se nota que el pie está dormido después de tres semanas de vacaciones. No tengo fuerzas para mantenerme de puntillas sobre él. Supongo que volverá con la actividad. Me ha vuelto a hacer un strapping para que pueda ir más tranquilo a Madrid mañana.

Sin embargo, al andar me duele el talón de Aquiles, sospecha de una tendinitis, que habrá que ver su evolución.

Como el tobillo sigue todavía un pelín inflamado, me ha recomendado que vuelva a verle en ocho días (jueves 6) para ver la mejora y en el caso, hacer una radiografía de la articulación.

En definitiva, que el buen hombre me ha dado su bendición para que acuda mañana a la capital y me lo pase lo mejor que pueda. ¡Amén!

Enlaces relacionados:

- El fatídico día del esguince (el accidente y la visita al hospital)

- El parte médico oficial (primer comunicado sobre el estado del enfermo)

- De nuevo en Urgencias (aunque esta vez con cita)