El sitio de los enfermeros

Mis compis de Herrera me saludan en uno de mis post anteriores, y de paso me comentan cierta polémica sobre el tema de los facultativos. Pensé en contestar directamente, pero me da para hacer un post medio-decente.

Yo ya temía que este tipo de artículos dieran lugar a la polémica.

Ante todo, y en contra de lo que pueda parecer, no tengo nada en contra de los médicos. Nada en absoluto. Al menos de los que conozco, a quienes tengo muchísimo aprecio tanto profesional como personal.

Pero eso no significa que me defienda y reclame lo que creo justo. Lo que me indigna es el desdén, sobre todo desde la Administración, con el que se trata a la enfermería.

En ese tema estoy "a la que cae", lo reconozco. Creo que si queremos el reconocimiento del que tanto hablamos (que si especialidades, que si PAE, que si pan frito...), debemos empezar a creérnoslo y exigir respeto. Y ese respeto debe ser tanto interno como externo.

Es decir, que desde el resto de estamentos laborales se sepa que la enfermería tiene su importancia, tanta como la medicina (no olvidemos que somos el colectivo más numeroso). ¿Quiere esto decir que el enfermero debe estar encima? Desde luego que no, pero tampoco por debajo. El enfermero hace tiempo que dejó de ser un mero Asistente Técnico Sanitario para llevarle las carpetas al médico y empujar el carrito pasillo arriba y pasillo abajo.

Eso era algo que me fastidiaba enormemente de Francia, el servilismo que veía: "rápido, prepara los dossier en la mesa que el médico está a punto de llegar" fue una frase muy oída (¿Él no sabe buscar o qué?). Y más de un enfrentamiento tuve por motivos de éstos.

Y también hablo de un reconocimiento del paciente, en donde a la enfermera no se le llame "la niña", o se le trate de "tú". ¿Acaso no ocurre que el médico es Don Fulano y el/la enfermero/a es "Pepito" o "Juanita"? Me niego a aceptar eso. No somos profesionales de segunda a los que se le pueda perder el respeto. Estamos de acuerdo en que el enfermero se sitúa más cerca del paciente, con lo que a nivel de relación implica, pero las distancias deben guardarse siempre.

Por no hablar del segundo supuesto, en el que le preguntas al paciente por su enfermero de atención primaria y lo desconoce por completo, preocupándose por conocer solo a su médico.

Pues no, mire usted, el quipo de atención primaria está formado por dos personas, médico y enfermero, facultativos ambos, cada uno con sus funciones bien definidas, y complementándose en su labor asistencial. El resto, es tontería.

Pero dicen que quien no llora no mama, y el colectivo enfermero no se caracteriza por llorar demasiado. Quizás resida ahí el principal problema. El enfermero medio se vuelve cómodo y si se encuentra agustito en su rinconcito, que no le molesten mucho.

A mi juicio, ese es nuestro principal problema como colectivo, que no somos un colectivo. A diferencia del cuerpo médico, que si sabe apretar bien las tuercas a los que mandan.

Es decir, que no veáis aquí un ataque a los médicos, sobre todo a los buenos. Pero al Cesar, lo que es del Cesar; y a los facultativos, lo que es de los facultativos ;)


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