San Juan '08: Los fuegos artificiales

La Alcazaba es muy bonita, pero no es el mejor lugar para disfrutar de los fuegos artificiales de la noche de San Juan.

Cada lugar tiene su momento, y el de la fortaleza árabe es a la puesta de sol, maravillosas, pero no es una buena idea si quieres exprimir al máximo nuestro espectáculo pirotécnico.

Esperados durante todo el año, nuestros fuegos tienen un nivel muy alto, y cada año se intenta sorprender al público con mayor luz y sonido.

Este año se gastaron cuarenta y cinco mil euros en los 30 minutos del show, pagados un año mas por el grupo KATRY, quien este año además se permitió el lujo de lanzar su nombre entre la traca final.

A diferencia del año pasado, esta vez elegimos la Alcazaba para contemplarlos, aprovechando que habíamos al Casco Antiguo a cenar. Nunca habíamos estado allí y muchas personas nos habían hablado de que era un lugar inmejorable.

El principal problema es la lejanía, unos dos kilómetros de distancia, lo cual hacía que el desfase entre rayo y trueno fuera considerable (y eso que teníamos el viento a favor). Aparte, uno de los atractivos de los fuegos es que, cuando explotan, iluminan por completo la oscura noche, y eso en el castillo no ocurría. Allí estuvimos todo el tiempo deslumbrados por los focos que alumbran las murallas. Y parte de los fuegos, los que discurren en medio del agua, no los veíamos.

Sobre el espectáculo en si, bastante parecido al del año pasado. Muy relajados al principio, a veces demasiado, para una extraordinaria y estruendosa traca final. Introdujeron figuras nuevas y sorprendentes, que arrancaron mas de un ohhhhh de asombro.

Y después de los fuegos, a seguir cenando, que las raciones nos estaban esperando.

El año que viene volverán a iluminar la noche pacense. Y ya sabemos donde no lo veremos.