En estos momentos (magia de la informática) voy camino de Lisboa para conocerla y pasar unos días por allá.
No conozco nada, así que todo será nuevo y emocionante.
Parece que lo que no va a acompañar va a ser el tiempo, que se presenta lluvioso (el paraguas lo tenemos).
Ya les contaré...
No tenía pensado felicitar las Navidades, más que nada porque si uno navega cinco minutos en Internet, le felicitan las fiestas trescientos millones de veces.
Y además, que te la suelen felicitar personas que no te hablan el resto del año, y con mensajes de "Control+C Control+V"; sin tener en cuenta los dibujitos tan horteras que uno puede recibir (este año, ¡el tuenti está lleno!)
El caso es que iba a pasar de todos estos enredos, cuando vi una foto que cautivó y me dije: "tienes que ponerla en el blog".
Así pues, el Sr. Jack Skellington y su gran amigo Oggie Boogie, ¡os desean Feliz Navidad!
Y para que no sea todo tan tópico, les añado un pequeño vídeo musical que está causando furor en la red. Es una gozada escucharlo:
De vez en cuando, uno lee y tiene conocimiento de noticias de las cuales no le gustaría ser el protagonista. Pero no por nada, sino porque se convertiría en el chascarrillo y objetivo de burlas de todo conocido. Y esta vez, además, ha ocurrido aquí, en Badajoz.
La historia es la siguiente: hace un par de jueves, un feliz muchachito consiguió sacarse el carné de conducir, tras muchas horas (suponemos) de nervios y agobios.
Para celebrarlo, esa misma noche se fue, con su recién estrenado coche, a la zona de marcha.
Y la alegría llevó al jolgorio, y el jolgorio a la irracionalidad, y ésta a beber más de la cuenta.
Pero miren ustedes qué mala suerte que, de vuelta a casa, la policía local le para y le hace soplar. Resultado: sobrepasa de largo la tasa de alcohol permitida. Pérdida del carné e inmovilización del vehículo.
Es decir, que el carné le duró apenas doce horas, y en su lugar, ahora tiene una denuncia y seguramente un juicio.
A esto lo llamo yo empezar con buen pie. ¡De récord, oiga!
Al final se acabaron las vacaciones y ni blogs, ni libros ni ná de ná...
Y una de las razones por la que no he tenido tiempo de hacer cosas es porque nos hemos dedicado con devoción a la última fase del PIR de la Junta de Extremadura (recordemos que el PIR es esa promoción de viviendas que la Joca construyó a muy bajo precio pero con las mismas calidades que las viviendas habituales)
El caso es que se acerca el fin de fiesta, tras dieciocho meses de aquella mañana de marzo cuando se produjo el sorteo.
Hipoteca aprobada, seguros firmados, gestores y notarios contentos... Si todo sale bien, entre el 15 y el 18 de este mes tendremos ya nuestras llaves.
